Tenía que dedicarle una reseña a uno de los títulos que mas he disfrutado este verano: Unpacking, un juego cuanto menos original y, en contra de lo que pueda parecer, bastante entretenido.
Este juego ha sido desarrollado por el estudio Witch Beam y la distribución ha corrido a cargo de Humble Games para traernos un concepto nuevo que estoy segura de que a muchos os encantará. Lo primero y que más llama la atención de Unpacking es su estilo artístico, preciosista y, como se suele decir, «que entra por los ojos». Es por eso que me llamó la atención nada más verlo. Colores vivos, vibrantes y escenarios diferentes, aunque en cierto modo familiar. Y digo familiar porque, ¿quién ha tenido la suerte de no tener que hacer mudanzas en su vida? Esta es la premisa básica de este título: tendremos que deshacer cajas y cajas de objetos, recuerdos y todo tipo de accesorios que nuestra protagonista ha ido llevando de casa en casa. Hablo de una protagonista porque es lo que se puede entender del contenido de las cajas, porque en ningún momento veremos su cara o aspecto, salvo en una escena final y alguna foto que nos irá dando pistas sobre ella y su vida.
Esto, sin embargo, es una de las cosas más llamativas y que más me ha gustado de Unpacking. Me encantan las narrativas originales, donde nada es evidente y eres tú, con tus dotes de gamer investigador, el que tendrá que ir suponiendo la historia, por pequeños detalles y guiños que te irán contando qué le depara a esta chica en sus diferentes mudanzas. Y, hablando de guiños, uno de mis favoritos ha sido tener que ir desempaquetando sus diferentes videoconsolas y juegos, cada uno según la época y edad de la protagonista (Xbox 360, Game Cube, Wii…), porque, como no podía ser de otra manera, ella es una gran aficionada a los videojuegos.
Sé que, a simple vista, Unpacking es el típico juego, como yo digo, «irreal». En serio, odio deshacer cajas de mudanzas, ¿por qué tendría que hacerlo para otra persona? Pero os aseguro que engancha mucho mas de lo que pueda parecer. Y es que siempre tienes la curiosidad de descubrir qué más trae en esas cajas, y, para los mas perfeccionistas, les encantará buscar el lugar ideal para cada objeto y recuerdo. Ahora bien, tendrás que prestar atención tanto a su nuevo hogar como a los diferentes objetos si quieres descubrir qué está pasando en la vida de esta gamer trotamundos, pues, como ya he comentado, es muy sutil, pero comprensible y accesible. Momentos como ir a la Universidad o volver a casa de los padres, escenas tan reales y que seguro que a en algún momento te harán sentir identificado.
Su jugabilidad es simple pero suficiente, un click and point en el que casi todos los objetos son manipulables: podrás recolocar muchas de las cosas que ya encuentres en las diferentes habitaciones y adaptarlas a las nuevas que irás posicionando en función, no solo de tu gusto personal, sino de una serie de objetivos que te marca el juego. Una vez termines de deshacer todas las cajas, el juego te indicará cuáles están «mal» colocados, y deberás buscar el sitio adecuado que te permitirá pasar a la siguiente mudanza. Esto, una vez más, forma parte de su narrativa particular, cuando, por ejemplo, colocas una foto en el corcho y, sin embargo, te indican que no está en el sitio adecuado. Entonces te das cuenta que esa foto y sus recuerdos quizás estén mejor en el cajón del olvido para nuestra chica en ese momento de su vida.
Su banda sonora corre a cuenta de Jeff van Dyck y sabrá acompañar en cada uno de los momentos del juego: más alegre, pausada, triste… ambientando a la perfección este título tan particular, añadiendo nuevos instrumentos en función de la historia e incluso voz para el final del juego. Como curiosidad, la voz de este tema final es de su directora creativa, Wren Brier, y es la guinda final para una historia emotiva, con sus altos y bajos, que sabe reflejar las vueltas que da la vida sin necesidad de mucho, pero lo suficiente para dejar huella. Sinceramente me quedé con ganas de más cuando terminé Unpacking. Recuerdo pensar aquello de «por favor, quiero una expansión, un DLC, algo más!», pero realmente no lo necesita. Como pequeña flaqueza, hay que reconocer que es un título claramente creado para PC, y esto en ocasiones se nota en los controles. Por suerte, han sabido manejar este asunto con la posibilidad de hacer zoom para facilitar el manejo de aquellos objetos mas pequeños y, al final, tiene unos controles mas que sobresalientes (que sean sencillos no siempre quiere decir que sean buenos). De corta duración y, para los cazadores de logros y platinos, mas que accesible y además, fácil y divertido de completar al 100%.
Como conclusión, recomendaría no dejarse llevar por su estética que a muchos os puede resultar frívola e incluso infantil, porque detrás tiene una historia llena de sentimientos, que refleja la vida real llena de cambios y momentos buenos y malos. Dadle una oportunidad a este título y disfrutadlo con calma, sin prisas, admirando cada detalle creado con tanto cariño y que aguarda alguna que otra sorpresa al final.
