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[Muy Top] Los cinco mejores juegos clásicos de Dragon Ball

La triste muerte de Akira Toriyama dejó huérfanos a los mayores guerreros del universo. Goku y compañía se quedaron sin su padre, pero nosotros nos quedaremos con lo bueno, con su legado. Un legado enorme en el mundo del videojuego, ya que Dragon Ball nos ha dejado auténticas joyas para el recuerdo. Hoy, repasaremos los que consideramos como sus cinco mejores juegos clásicos.

Dragon Ball Z: La Légende Saien

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O lo que es lo mismo, la revolución de los juegos de Dragon Ball. La segunda entrega de la serie de lucha, exclusiva de Super Nintendo, conocida como Dragon Ball Z: Super Butouden 2 en Japón, tuvo lanzamiento europeo al igual que su precuela. A España llegó la edición francesa con el nombre de Dragon Ball Z: La Légende Saien, pero con el manual traducido al castellano.

Fue tal la revolución que se produjo en nuestro país que las tiendas de videojuegos te pedían que esperaras para comprarlo, que no importaras el original japonés. Existía una campaña en la que te incitaban a no comprarlo así porque tenías que usar un adaptador que podría dañar a tu Super Nintendo PAL española. Además, el cartucho japonés valía un ojo de la cara, pero, por suerte, sí que se produjo el ansiado lanzamiento de forma oficial.

¿El juego? Dragon Ball Z: La Légende SAIEN es un juego de lucha creado por TOSE y distribuido por Bandai que fue lanzado en 1993 en Japón, llegando más tarde, en 1994, a Francia y España, en una época en la que el anime gozaba de una enorme popularidad. El juego utilizaba el sistema de la anterior entrega, es decir, que cuando nos alejábamos de nuestro oponente, la pantalla se dividía por una línea.

Los combates, con un cierto componente estratégico, se volvían épicos. Cada personaje contaba con los poderes de la serie, consiguiendo que el cartucho para Super Nintendo fuese lo más parecido al anime que había entonces. Además, a nivel técnico era una maravilla, con personajes muy detallados y unas animaciones muy logradas. Vamos, que en 1994 era el sueño húmedo de todo fan de Dragon Ball Z que se precie.

Dragon Ball Z: Hyper Dimension

Tras una decepcionante tercera entrega de la serie Super Butouden, Dragon Ball nos tenía otra sorpresa preparada, también en exclusiva para Super Nintendo. ¿Su nombre? Dragon Ball Z: Hyper Dimension, otro espectacular juego de lucha que cambió el sistema de juego visto en la la trilogía Super Butouden para la 16bit de Nintendo.

Esta vez fue la propia Bandai, quién lanzó el juego en 1996 en Japón, apareciendo, de nuevo, en Francia y España más tarde, en 1997. Dragon Ball Z: Hyper Dimension prescinde de la pantalla partida de sus predecesores, convirtiéndose en un juego de lucha más típico, es decir, con más acción y un menor componente estratégico.

Se apuesta por combates más cuerpo a cuerpo, mucho más arcade, pero con una serie de novedades muy interesantes. Una de ellas es la inclusión de un segundo plano de movimiento, muy similar a lo visto en la saga Fatal Fury. La otra es la barra de vida de nuestro personaje, que puede recargarse si nos concentramos, sin embargo, disminuye cuando lanzamos algún ataque especial. Todo un puntazo.

La guinda al pastel la pone un apartado técnico de vértigo que supera claramente a lo visto en los demás títulos para Super Nintendo. Eso sí, el modo historia es exclusivo de Japón, por lo que las versiones occidentales no lo tienen. Aún así es uno de los juegos basados en Dragon Ball Z que no te puedes perder si tienes una Super Nintendo.

Dragon Ball Z: The Legend

Vamos con uno de los más curiosos. Dragon Ball Z: Idainaru Dragon Ball Densetsu apareció en Japón en PlayStation y Saturn, pero la versión para la consola de Sega sí que llegó a España y Francia con el nombre de Dragon Ball Z: The Legend. Con TOSE y Bandai de nuevo a los mandos, este es uno de los juegos de lucha más atípicos basados en el popular manga/anime.

Al contrario que ese mejorable Dragon Ball Z: Ultimate Battle 22 que recibimos en PlayStation, o Dragon Ball Z: Shin Butouden para Saturn que no salió de Japón, en Dragon Ball Z: The Legend participamos en combates por equipos de hasta tres luchadores. Eso sí, pese a lo que pueda parecer, el desarrollo de los combates recuerda más a lo visto en juegos como Super Smash Bros. que los juegos de la saga The King of Fighters.

En Dragon Ball Z: The Legend contamos con un plantel de personajes envidiable para la época. De ahí formaremos nuestro equipo y nos meteremos de lleno en un entorno completamente en 3D con personajes realizados con sprites. Ahí, daremos caña con ataques sencillos, todo para rellenar una barra de poder que se sitúa a mitad de la pantalla. Dicha barra tiene dos colores: azul y rojo. Esto quiere decir que cuántos más golpes demos más llenaremos la barra de nuestro color y, si llegamos a llenarla del todo, podremos ejecutar un súper ataque.

Como veis, este Dragon Ball Z: The Legend es bastante diferente a los títulos anteriores para Super Nintendo. El resultado es un juego muy entretenido, con partidas rápidas y divertidas, además de abarcar varios arcos argumentales de nuestro anime favorito. Un juego cargadito de luz, fuego y destrucción.

Dragon Ball: Advanced Adventure

Game Boy Advance, la pequeña consola portátil de Nintendo considerada una Super Nintendo en miniatura, nos dejó un buen grueso de juegos basados en la genial obra de Toriyama. Uno de los más recordados es Dragon Ball: Advanced Adventure, una suerte de beat ‘em up mezclado con juego de lucha que recorre la historia de Goku cuando era niño.

La desarrolladora Dimps realizó esta pequeña maravilla, que vio la luz en 2004 en Japón de la mano de Banpresto. Bandai lo lanzó en 2005 al mercado europeo, llegando en 2006 al territorio americano de la mano de Atari. Como decimos, en Dragon Ball: Advanced Adventure manejamos a un Goku inexperto que partirá en busca de las bolas de dragón.

El desarrollo general es el típico de los beat ‘em up, pero con elementos plataformeros. Cuando alcanzamos a un jefe de fin de fase, la cosa cambiará y el juego se convertirá en un título de lucha uno contra uno. Si le sumamos un control exquisito y un apartado técnico hecho con mucho cariño, con un pixel art impresionante, tenemos a uno de los mejores juegos de Dragon Ball que podemos recomendar.

Un cartucho muy especial, adictivo como pocos, con detalles por todas partes, perfecto para el fan más acérrimo de Goku y compañía. Sí, puede pecar de ser un poco corto, pero es uno de esos juegos que te atrapan de principio a fin. Genial.

Dragon Ball Z: Budokai Tenkaichi 3

Terminamos con el título más moderno de esta selección. Para muchos, el juego de lucha definitivo basado en Dragon Ball Z. Hablamos de Dragon Ball Z: Budokai Tenkaichi 3, tercera parte de la saga Tenkaichi que en Japón se le conoció como Dragon Ball Z: Sparking! Meteor y que vio la luz en 2007 en PlayStation 2 y Wii.

Desarrollado por Spike, Dragon Ball Z: Budokai Tenkaichi 3 fue distribuido por Namco Bandai en Japón y Europa y por Atari en América. Se trata del juego de lucha basado en Dragon Ball con el mayor número de personajes jugables que existe. Hablamos de la abrumadora cifra de nada más y nada menos que de 161 personajes, todo sin DLCs ni micropagos de ningún tipo. A ver si se tomamos buena nota para los lanzamientos actuales.

¿El juego? Es casi como estar jugando al anime, salvando las distancias, claro. Budokai Tenkaichi 3 viene cargadito de modos de juego con el argumento de básicamente todos los arcos de Dragon Ball aparecidos hasta el momento. Combates espectacularmente épicos, con una cámara atípica puesta sobre el hombro de nuestro luchador. Vamos, la versión definitiva de la saga Budokai Tenkaichi 3, cogiendo todo lo de las anteriores entregas y aumentándolo al máximo.

Descomunal es un adjetivo que le queda que ni pintado a este título. Se podría decir que estamos ante el juego de lucha definitivo de Dragon Ball. Un sistema de juego complejo y lleno de posibilidades, modos de juego para aburrir, un apartado técnico de ensueño y el rooster de personajes más salvaje incluido jamás en un juego de lucha. ¿Se podrá superar algún día? Solo el tiempo lo dirá.

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