Capcom ha desvelado hoy una grata sorpresa para los seguidores de una de sus sagas más famosas, con permiso de Resident Evil. La compañía nipona ha anunciado el desarrollo del juego Monster Hunter Stories, un spin-off de la franquicia que, en palabras de Ryozo Tsujimoto -actual productor de los juegos de la serie-, es considerado como un reto para el equipo ante los cambios que están añadiendo.
Y no es para menos, ya que el título lleva en marcha desde hace 5 años. Lo primero que salta a la vista es el llamativo estilo artístico del que hace gala el título, alejado de las últimas entregas de la saga y abrazando la técnica cel-shading, más colorida y abandonando el estilo fotorealista, tal y como puede comprobarse en el tráiler colocado bajo estas líneas.
Sin embargo, las intenciones de Capcom más mucho más allá de un mero cambio visual. Y es que Monster Hunter Stories apostará por potenciar la historia, más propia dentro del género de rol clásico, sin renunciar, eso sí, a las convenciones principales de la franquicia. De esta manera, parece que el título se acercará más a la experiencia que puede ofrecer Dragon Quest o Final Fantasy en lugar de elaborar un juego en el que una serie de misiones sobre cazar y derrotar monstruos sea el eje principal.
Pocos son los detalles que han querido mostrar por ahora sobre el proyecto, aunque desde Capcom aseguran que no tardaremos en conocer nueva información, por lo que no sería descabellado pensar en el E3, la feria más importante del sector y que tendrá lugar en el próximo mes de junio. Lo que sí hemos podido saber es que el rol del jugador pasará de ser un cazador a un jinete, un cambio que cualquiera puede notar al echar un vistazo al vídeo que acompaña esta noticia.
Monster Hunter Stories llegará en exclusiva a Nintendo 3DS en 2016 a Japón. Todavía no se ha confirmado su salida en el mercado occidental, pero teniendo en cuenta que las entregas de la saga lanzadas en las consolas de Nintendo suelen abandonar las fronteras del país nipón -con mucho retraso, eso sí-, sería de extrañar que el título no se vendiera en Europa y América.
