La novela Metro 2033, publicada en 2005 por el escritor y periodista ruso Dmitry Glukhovsky, supuso el pistoletazo de salida no sólo de una saga literaria, sino también de una franquicia de videojuegos. Pese a que a partir de Metro: Last Light siguió un camino bastante diferente que su homólogo escrito a nivel argumental, su denominador común es el mismo: un futuro cercano postapocalíptico en el que una guerra nuclear a hecho del mundo un lugar inhabitable. Aparte de la radiación, toda una serie de mutantes campa a sus anchas en el exterior, por lo que el metro de Moscú se ha convertido en el último reducto conocido de la humanidad.
Pues bien, la entrega más reciente de esta saga, Metro Exodus promete dar una vuelta de tuerca a ese universo. La nueva entrega presentará unos niveles mucho más amplios y una trama menos lineal que la de sus predecesores. Esto es posible gracias al cambio de concepto. Si bien hasta ahora la humanidad había estado confinada en su vida subterránea, en este juego Artyom y compañía se aventurarán en el mundo exterior para buscar una nueva vida.
Es este cambio de paradigma el que propicia esa ampliación del concepto de juego, tanto a lo que respecta a las dimensiones de los escenarios antes comentadas como a los distintos matices de la ambientación, ya sea el cambio de estaciones del año, la evolución de los personajes según nuestras decisiones al más puro estilo sandbox como, por supuesto, las nuevas criaturas mutantes con las que nos toparemos.
El juego será lanzado el 15 de febrero del próximo año (antes de lo que se estipuló en un principio) para PC, PS4 y Xbox One y, para abrir boca, Deep Silver y 4A Games han publicado nuevas imágenes de los habitantes de ese nuevo mundo que nos espera.
