[Jugando a…] The Simpsons: Bart’s Nightmare

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Título: The Simpsons: Bart’s Nightmare

Plataforma: Super Nintendo y Mega Drive (Genesis)

Desarrolladora:  Sculptured Software

Publicado por: Acclaim

Género: Varios

Lanzamiento: 1992

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Aunque creo firmemente que los mejores juegos de los Simpson son los de la generación de 128 bits (especialmente The Simpsons Road Rage y The Simpsons Hit and Run) no puedo negar que he dedicado muchas horas a algunos de sus juegos anteriores.

Si hay algo que tienen los juegos clásicos de los Simpson es un apartado visual muy detallado a la hora de mostrar a los personajes, casi diría que en algunos juegos se centraron en eso y el resto les pareció secundario, total, lo importante era que se viese llamativo y los niños reconociesen los personajes.

Desde el Arcade de Simpsons (al estilo Double Dragon) a los juegos de 8 bits (que principalmente sufrían debido a su control) los juegos de esta familia amarilla han llamado la atención tanto para bien, como para mal.

En la época de los 16 bits aparecieron 4 juegos de los Simpson, uno dedicado a Itchy y Scratchy (The Itchy and Scratchy Game), otro protagonizado por Krusty (Krusty Fun House) y dos protagonizados por Bart donde teníamos que superar una serie de minijuegos sin aparente conexión entre ellos (Bart’s Nightmare y Virtual Bart).

En esta ocasión hablaré de Bart’s Nightmare, pues no solo lo disfruté bastante de pequeño, si no que a todas luces me parece mucho mejor que Virtual Bart (pese a que ambos son tan similares que comparten los mismos defectos).

Este juego nos cuenta que Bart se queda dormido mientras trata de estudiar, con tan mala suerte que sus hojas de apuntes se vuelan por la ventana. Al tratar de recogerlas Bart cae hacia la calle y llega a un mundo que se parece a Springfield, pero no es exactamente igual, aunque lo importante es no perder el tiempo y buscar las malditas páginas que ha perdido.

Desde el principio del juego veremos a Bart en mitad de una calle cualquiera de Springfield (aunque se conoce como Windy World), podemos movernos hacia izquierda, derecha, arriba o abajo, pero no parece haber ninguna dirección que haga que el juego avance realmente, ya que este se repite en bucle de manera horizontal.

Empieza el juego

El objetivo del juego es sobrevivir a esa fase de la calle mientras buscamos las hojas de apuntes, y al verlas, saltar encima de ellas para que nos lleven a un minijuego que, en caso de superarlo, nos permitirá recuperar la hoja en cuestión.

Antes de hablar de los minijuegos me gustaría comentar algunas cosas de esta parte de “la calle” porque es algo bastante único como concepto.

Lo primero a tener en cuenta es que da igual hacia donde te muevas, la hoja de apuntes puede estar en cualquiera de los dos sitios. La única manera de obtener una pista para saber dónde está la más cercana es saltar buzones, si lo hacemos correctamente unas cuantas veces consecutivas aparecerá un símbolo de pregunta y al tocarlo una flecha nos indicará hacia qué dirección debemos ir. Esto es bastante fácil, pero tened en cuenta que los buzones están vivos.

Al ver esa flecha y dirigirnos a toda velocidad en la búsqueda de la hoja, tendremos que tener en cuenta que este Springfield del mundo de los sueños es un lugar donde solo los más duros sobreviven, ya que nos encontraremos con enemigos y personajes que nos molestarán sin descanso y donde solo los más hábiles sobreviven.

La barra de vida de Bart es una especie de corchete con algunas Z dentro, al recibir golpe se vacían y cuando nos quede una Z, una niebla nos avisará que al siguiente golpe moriremos (o lo que es lo mismo, Bart se despertará y se acabará el juego). La manera de recuperar vida es usar una bola de chicle que toque a una Z azul y esta subirá a nuestra barra de vida. Pero hasta en eso han decidido complicarlo, pues en caso de tener la vida en corchetes, la Z ha de caer dentro de ella (podemos mover la cámara para intentar ayudar a la letra, pero no hace milagros). Si estamos en el último golpe, con la pantalla llena de niebla, esa nueva Z subirá hasta arriba y creará una nueva barra de vida que irá desde el punto donde ha subido esa letra, hacia donde este la otra, de manera que si esa nueva Z esta en el extremo izquierdo de la pantalla y la otra, en el derecho, nuestra barra de vida será del tamaño de toda la pantalla (algo a agradecer a la hora de llenarlo de letras, claro) pero si están juntas, tendremos una barra de vida minúscula. ¿Extraño? Pues sí, pero esto es el principio.

Un golpe más y moriremos

También existen otras Z de color rojo, estás no nos subirán la vida, de hecho explotan al entrar en contacto con el globo de chicle que lanza Bart, de manera que solo valen para “atacar” a algunos enemigos, algo que sucederá puntualmente, pues las Z rojas aparecen de mucho en mucho y tiene que dar la casualidad que pase un enemigo “abatible” y que le deis a la Z con el chicle en el momento indicado para que explote en su cara ¿vale la pena? La verdad es que si, aunque no marca ninguna diferencia jugable (es más fácil evitar el enemigo que hacer todo esto) es muy satisfactorio.

Las otras habilidades de Bart no son tan crípticas, pues puede disparar pepitas de sandía para atacar, saltar por encima de los enemigos para evitarlos o destruirlos, usar el monopatín para ir a más velocidad y eructar para eliminar todos los enemigos en pantalla (siempre y cuando haya conseguido una lata de refresco). Solo hay dos momentos en los cuales Bart no puede usar estas habilidades: cuando Lisa lo convierte en rana y cuando el director Skinner pasa a su lado y le pone la ropa de ir a la iglesia los domingos y llegado a este punto creo que debo explicar un poco, los peligros que acecharán a Bart mientras esté en la calle.

Bart convertido en rana

Mientras nos movemos por la carretera buscando las hojas, decenas de enemigos vendrán a amargarnos la vida. El enemigo más común y difícil de evitar es Otto conduciendo el autobús a toda velocidad por la carretera (motivo por el cual recomiendo ir por las aceras siempre que sea posible) también será difícil evitar a los gamberros de Springfield, que no nos harán daño, solo nos atraparán para obligarnos a ir en sentido contrario (hasta que Lisa los convierta en ratas). Después tenemos a la citada Lisa (convertida en hada), a Skinner con el traje de los domingos en una percha (que no es algo necesariamente malo, ya que aunque no podamos usar las habilidades de Bart, nos vuelve inmortales durante un rato) a una vieja que lanza desagradables besos (que son el antídoto de la magia de Lisa), una mancha de grasa (nos ralentizará), la cabeza de Jebediah Springfield (de los enemigos más molestos), una pelota de baloncesto (si la saltamos se convierte en monopatín) y muchos más, todos y cada uno más raro que el anterior.

Enemigos al acecho

Todo lo dicho anteriormente describe la parte de “la calle” que a su vez no deja de ser la zona principal del juego donde buscamos las hojas que nos permiten acceder a los diferentes mundos, así que tendremos que concentrarnos en sobrevivir para encontrarlas.

Una vez encontramos una de estas hojas saltamos encima y Bart aparecerá frente a dos puertas, tendremos que elegir una o el juego lo hará por nosotros. Cada puerta lleva a Bart a vivir un sueño diferente y en caso de superarlo obtendremos la hoja de apuntes.


Cada color de puerta es un minijuego

La puerta verde convierte a Bart en Godzilla en un minijuego bastante complejo para lo que parece a simple vista. Mientras “BartZilla” anda por la ciudad tendremos que eliminar a los enemigos que nos acechan (tanques, aviones, trenes…). Esto parece fácil pero no lo es ya que cada enemigo viene por un plano diferente de profundidad y tendremos que memorizar qué ataque le hace daño. Si usamos la cruceta, Bart disparara bolas de fuego hacia donde hayamos tocado y si tocamos los botones, disparará rasos láser por los ojos hacia varias direcciones. Como he dicho, parece fácil, pero no lo es, además, Bartzilla no tiene marcador de vida pero no es inmortal, así que simplemente hay que tratar de evitar que nos dañen demasiado.

Si superamos la parte de la ciudad, nos tocará trepar un edificio donde aparecerá Marge convertida en Momthra (homenaje a Mothra) y Homer King Kong.

Bartzilla en acción

La puerta amarilla nos lleva al mundo de Itchy y Scratchy, en un minijuego bastante rápido y violento donde al primer despiste moriremos. Lo bueno de este nivel es que Bart puede obtener muchas armas y si sois un poco hábiles también conseguiréis vidas extra fácilmente. Siguiendo con el espíritu de la serie, el gato y el ratón se intentaran matar con armas cada vez más letales y Bart sufrirá los daños colaterales (casi cualquier ataque enemigo es una muerte instantánea). Pese a su alta dosis de letalidad, es uno de los minijuegos más accesibles.

Si te despistas un segundo, morirás

La puerta rosa envía a Bart a un mundo acuático, algo raro, donde tendrá que nadar y atrapar enemigos para inflarlos hasta hacerlos explotar (algo así como Dig Dug pero buceando) al hacerlo aparecerá un logo de Joe Fisión y en caso de tocarlo, irá rompiendo la barrera que mantiene prisionera la hoja. Posiblemente es el juego más fácil y sencillo.

Este minijuego es el más fácil

La puerta azul nos pone en la piel de Bartman, que surcará por los cielos de Springfield usando su letal (más o menos) tirachinas como arma. Este minijuego es bastante largo y requiere mucha práctica, pues además de tener que eliminar enemigos comunes y evitar peligros (como misiles o nubes radiactivas) tendremos que ser muy hábiles para enfrentarnos con los jefes finales (y hay unos cuantos).

Apu os dará un ítem para recuperar vida

La puerta naranja nos llevará a un mundo del estilo Indiana Jones, donde Bart irá moviéndose por cuadrados de colores hasta llegar al final. El control de este nivel es raro pues usaremos la cruceta para hacer que Bart salte hacia la dirección que queramos, mientras que los botones se usaran para el látigo. Cada paso que Bart da, las piedras de alrededor se mueven (algunas se levantan, otras se hunden) y eso es un aviso para que sepamos que la mayoría de plataformas se hundirán en cuanto saltemos en ellas. Moverse por este nivel es muy difícil, pero a eso hay que sumarle que tenemos enemigos molestándonos y que incluso Maggie (que aparece en forma de pintura en el fondo) nos disparará su chupetete. Sin duda, para mi es el más difícil de los minijuegos, no tengo paciencia.

Necesitareis mucha paciencia en este nivel

Cada vez que un minijuego sea completado nos darán una hoja y una vez las tengamos todas podremos ver el final del juego. Aunque para lograr eso tendréis que haber muerto un centenar de veces, porque este juego es bastante duro y no ofrece continuaciones, passwords ni salva partidas. Al menos la pantalla de Game Over nos da la alegría de ver que mientras más hojas tengamos, la nota de Bart va subiendo, aunque el resultado siga siendo un suspenso.

Hemos conseguido una hoja

Este juego tuvo cierta fama en su día, pero no conozco a nadie que realmente lo considerase una maravilla o el mejor juego de los Simpsons de 16 bits (en mi opinión ese mérito se lo queda Krusty’s Fun House).

Sin embargo hay que admitir que con Bart’s Nightmare trataron de hacer algo original en planteamiento, aunque quizás se pasaron en cosas que se tendrían que haber simplificado (como que la barra de vida se llene con globos de chicle y letras Z son de todo menos intuitivas, cuando una barra de vida normal e ítems que la rellenasen sería más coherente.

Con la dificultad podemos decir lo mismo, algunos minijuegos son accesibles si insistes un poco, pero otros pueden ser terribles dando un juego tremendamente desequilibrado. Lo curioso de esto es que podrían haberlo solucionado (al menos parcialmente) añadiendo passwords o continuaciones.

Game Over

En cualquier caso, este juego es un placer culpable para mí, me gusta jugarlo de vez en cuando y ver cuántas hojas consigo. No aspiro a pasármelo, pero me divierte hacer algunos de los minijuegos.

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