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Título: Misery
Año: 1990
Duración: 107 minutos
Director: Rob Reiner
Reparto: James Caan, Kathy Bates, Lauren Bacall, Richard Farnsworth, Frances Sternhagen
Guión: Stephen King (obra original) William Goldman
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Esta sección se inició a mediados del 2014 y desde entonces hemos comentado más de un centenar de películas (esta sería la número 114) y sin embargo nos las hemos apañado para ignorar a uno de los grandes escritores del género del terror (y sus correspondientes adaptaciones a película de sus libros).
Me refiero a Stephen King, un escritor muy popular y uno de los estandartes literarios del género de terror. Muchas de sus películas se han llevado al cine (algunas con más acierto que otras) y su legado parece no terminar jamás, pues este mismo año se están estrenando películas de sus libros (La Torre Oscura y un remake de It). Pese a lo que pueda parecer, ninguno de los redactores de esta sección odiamos a King (más bien todo lo contrario) pero la casualidad ha hecho que no hayamos dedicado artículos a las películas basadas en sus geniales libros.
Pues bien, hoy toca hablar de una película basada en un libro de Stephen King: Misery, dirigida por Rob Reiner.
El famoso escritor Paul Sheldon está en un hotel aislado en una población montañosa aislada por la nieve celebrando haber terminado su última novela. Paul obtuvo la fama gracias a la saga de libros del personaje Misery, hasta el punto que se tuvo que dedicar a ella sin poder escribir de otra cosa, de manera que esta nueva novela es un gran paso en su carrera.
Tras finalizar su estancia, Paul conduce su coche por las nevadas carreteras de montaña. La tormenta empeora y termina sufriendo un accidente. Afortunadamente por ahí pasaba una mujer que fuerza la puerta del coche para sacarlo y se lo lleva a casa.
El terrible accidente ha roto las dos piernas y un brazo de Paul. Afortunadamente, su salvadora (Annie Wilkes) es una veterana enfermera que le ha preparado una improvisada habitación para cuidarlo hasta que vuelva el buen tiempo y pueda llevarlo al hospital.
Annie es además la fan número 1 de Paul y es una fanática de las novelas de Misery, de manera que el escritor le deja leer su nueva novela como agradecimiento y para quitarse la duda sobre si gustará a los fans de sus anteriores libros.
La nueva novela de Paul desagrada muchísimo a Annie, que se molesta al ver palabrotas y otras cosas inadecuadas, mostrando así una cara mucho más amarga y severa de la que ha mostrado hasta ahora. Afortunadamente el enfado le dura poco, pues acaba de salir a la venta la última novela de Misery en la cual la protagonista muere.
Paul es consciente de que está totalmente inmovilizado y que Annie se toma demasiado en serio los libros, de manera que empieza a inquietarse y a temer su situación ¿Qué hará Annie cuando descubra lo que le pasa a su querida Misery? ¿Encontrará la policía el coche de Paul entre la nieve y empezará una búsqueda?
Esta es una de esas películas con pocos personajes y escenarios, por lo cual todo queda en manos de los actores que hacen los papeles principales. En este caso, hay que decir que tanto James Caan y Kathy Bates dan lo mejor de sí mismos. James Caan, en su papel de accidentado sin movilidad transmite fragilidad pero decisión por cambiar su situación. Como es el protagonista, sabes que algo le tendrá que salir bien, pero, al mismo tiempo, está al filo de que todo le salga mal. Son muchos sus intentos fracasados de salir de su situación, así como sus planes de tratar de manipular la actitud de su cuidadora para obtener más tiempo a la hora de evitar un posible desenlace fatal. Es imposible no sentir la impotencia de Caan en la escena de la copa.
Kathy Bates, por su parte, es experta en darnos dos versiones de su personaje. Por un lado, tenemos la mujer alegre y apasionada leyendo novelas que la hacen olvidarse de su lamentable vida. Por el otro, tenemos a una persona fría y absolutamente demente, siéndolo además de la peor clase, de las que creen que están haciendo el bien absoluto que solo ellos comprenden.
La película es un partido de ping pong entre ambos actores y sus personajes, de manera que los otros personajes quedan en segundo plano. Admito que se me hace simpático el personaje del Sheriff con olfato de detective, pero es una pena ver que después de probar todos los medios convencionales (y creíbles) para encontrar una respuesta a la desaparición del escritor, termine obteniendo la respuesta a su caso de una manera bastante inverosímil y casual.
Se dice que Misery fue la respuesta de King a algunos fans demasiado entusiastas que lo presionaban sobre sus futuros libros y la verdad es que me lo creo, porque en algunos momentos de Annie con respecto a los libros de Paul me he visto representado (concretamente cuando escribe el principio de la nueva historia de Misery y Annie se lo critica porque no encaja con el final del libro anterior) y eso me hizo sentir miedo en otro sentido.
En general, Misery es muy recomendable. Es cierto que empieza siendo muy lenta, pero cuando empiezan los cambios de humor de Annie la cosa ya no se detiene.
Curiosidades sobre la película:
- El director de la película hace también el papel de piloto de helicóptero
- Kathy Bates ganó un Globo de oro y un Oscar por su papel en esta película.
- Annie es mucho más agresiva y demente en el libro, llegando a amputar partes del cuerpo de Paul.
- En la novela Paul se vuelve adicto a las pastillas que Annie le da, en la película no parece que le provoquen ninguna adicción.
